21/07/2025 14:00:00h
El Barça de Hansi Flick está cogiendo forma, y no solo por los fichajes de fama o por nombres de renombre. En estas primeras semanas de pretemporada, hay tres chavales que han cautivado al técnico alemán. No eran los que sonaban para ser titulares, pero sus nombres empiezan a resonar en los despachos del Camp Nou.
Mientras muchos pensaban que se iban a quedar en el filial, Flick ha hecho un movimiento sorprendente. No solo se quedan en el equipo, sino que ya están entrenando a tope con los mayores. A no ser que algo cambie de última hora, ya tienen su sitio asegurado en la primera plantilla para la 2025/26.
Nadie esperaba que Flick apostara tan fuerte por la cantera desde el principio. Pero se lo ha creído, gracias a la calidad y madurez que han mostrado estos tres jóvenes. Su nivel es tan alto que hasta se está hablando de darles bola en los primeros partidos oficiales.
La primera joya, un gallego con arte en las botas
El primer nombre que ha impresionado al staff técnico es un mediocentro ofensivo que tiene magia en sus pies. Su edad es sorprendente, porque tiene solo 17 años, pero juega como si tuviera muchos más. El gallego Pedro Fernández ha sido la gran sorpresa del verano para Hansi Flick.
Pedro, que viene del Juvenil A del Barça, llegó a La Masia desde su pueblo natal, Nigrán. Lo que más destaca de él es su habilidad para girarse, ver el pase imposible y mantener el control como un crack. En los entrenos ha sobresalido entre otros centrocampistas más consagrados y ha ganado su lugar.
Flick lo ve como un jugador que puede desempeñar tanto el rol de interior como de mediapunta. Su calidad con el balón, calma en espacios apretados y visión de juego lo han convertido en una apuesta personal del técnico. El vestuario está flipando con lo rápido que se ha adaptado.
Un lateral que se cuela en los planes de Flick
El segundo caso ha sido igual de inesperado. Hablamos de un defensor rápido, con buen físico y una lectura táctica que ya la quisieran muchos: el lateral izquierdo Jofre Torrents. Con solo 18 años, ya había dado pasos firmes en el Barça Atlètic, pero ahora está listo para subir de nivel.
Torrents es de La Selva del Camp y ha escalado de manera sólida en todas las categorías formativas del club. Flick lo ha utilizado tanto en defensa como de carrilero, y su polivalencia ha sido clave. No solo defiende como un león, también se suma al ataque y sabe cuándo dar ese paso adelante.
Su compenetración con los extremos ha sido notable durante la pretemporada. La intensidad que muestra, más su fiabilidad, han convencido al cuerpo técnico para que no se le ceda ni se le baje al filial. Se queda, y peleará por minutos desde el banquillo del primer equipo.
El arma ofensiva que llega para romper defensas
La tercera sorpresa en la lista no es de La Masia, pero ya se le trata como si lo fuera. El joven extremo Roony Bardghji, fichado este año, ha dejado alucinado a Flick con su desparpajo y capacidad para romper el ritmo del partido. Su entendimiento del juego ha sido clave para adaptarse al estilo del Barça.
Roony ha brillado en los entrenos con regate, asistencias y un descaro que normalmente no se ve en alguien recién llegado. Flick lo ve como un recurso de oro para los partidos cerrados, capaz de abrir defensas con un toque mágico. Y no solo eso, también se involucra en la defensa.
En solo unas semanas en el club, el sueco ha demostrado que merece un lugar en el primer equipo. Su caso se analizará a fondo, pero de momento está claro: se queda bajo la mirada de Flick. Y el técnico quiere que empiece la temporada sintiéndose parte del equipo.
El futuro comienza ahora
El Barça quiere recuperar su esencia con jóvenes comprometidos, ya sean de la casa o con ADN Barça. Estos tres nombres, Pedro Fernández, Jofre Torrents y Roony Bardghji, son la cara de la nueva era que quiere instaurar Flick. Una mezcla de talento, ambición y disciplina que ilusiona a todo el club.
La directiva está a muerte con la apuesta del entrenador y no descarta inscribir a los tres en el primer equipo. Su impacto ha sido tan inmediato que incluso podrían debutar antes del cierre del mercado. En un verano lleno de dudas, ellos son la mayor certeza.
Y mientras otros se vuelven locos buscando fichajes, el Barça mira hacia La Masia… y sonríe.