¡Chavales! Las negociaciones van a toda leche y el propio jugador ya ha soltado que quiere pegar el salto al Camp Nou. Según los que saben del tema, Nico ha dejado claro a Deco que quiere jugar en el Barça, así que esto está dando un vuelco en el planning de fichajes. La movida podría costar unos 60 melones, y parece que va a cerrarse en un plis.
Descartado por el ‘efecto Nico’
Pero ojo, porque la llegada de Nico Williams ha cambiado el juego: el Barça ha mandado al peo la opción de fichar a Luis Díaz. El crack colombiano del Liverpool era un fichaje favorito para la banda izquierda, pero con Nico en el horizonte, la cosa ha cambiado.
El chaval quiere formar parte del proyecto, encaja en lo que quiere el equipo, y le han dado todo el apoyo en el vestuario, lo que ha pesado más que cualquier otra cosa. A diferencia de Luis Díaz, que costaba más de 70 millones de euros, lo de Nico suena mucho más razonable, tanto en pasta como en ganas del jugador.
Ofensiva definitiva
Una de las cosas que más le mola al Barça de esta negociación es la actitud del jugador. Nico no solo ha dicho «sí, quiero», sino que ha sido proactivo y ha mostrado muchas ganas de unirse al proyecto. En un mercado donde todo es competencia y números, ese tipo de predisposición vale oro.
Hansi Flick, por su parte, ya ha dado el visto bueno desde el punto de vista deportivo. Piensa que el chaval va a aportar velocidad, desequilibrio y profundidad a una plantilla que necesita sorpresas por las bandas. Su juventud y su experiencia internacional lo hacen un refuerzo estratégico, pensado no solo para ahora, sino para el futuro.