Estaban allí hablando de un grande como es el Espanyol, recordando a viejas glorias como Rafa Marañón, Iñaki Pérez de Arrilucea, Joan Capdevila o Raúl Longhi. Además, algunos cracks que ahora están en el fútbol base, como Toni Velamazán, Víctor Ruiz y Lara Rabal. Todo esto se cocinó en el Auditori Juan Segura Palomares del RCDE Stadium, justo antes de que los equipos se lucieran en el campo. El gran maestro de ceremonias fue el director deportivo perico, Fran Garagarza, quien no se cortó y dijo que “es el momento de lo que creemos, lo que queremos y hacia dónde vamos”.
El colega Garagarza desglosó las tres etapas de la cantera: la fase de iniciación (del Benjamín B al Infantil B), la de maduración (del Infantil A al Juvenil B) y la de rendimiento, que incluye al Espanyol B, Vilassar y el Juvenil A, y cuya cabeza pensante es Ander Garitano. “El fútbol profesional y el fútbol base son como dos lados de la misma moneda, se complementan en un modelo horizontal”, soltó el crack, añadiendo que la cantera “interesa y emociona” a los nuevos jefes del Espanyol, Velocity Sports Limited, con Alan Pace al timón.
27 universitarios en La 21
Con 27 jugadores universitarios y 48 en Bachillerato y ciclos, el Espanyol tiene claro que “el seguimiento académico es clave”. También son importantes el proyecto de valores y un nuevo plan que han lanzado: el Proyecto 3F (fútbol, formación y familia). Esto consiste en hacer reuniones con las familias de los jugadores cada dos meses para “compartir ideas y darles herramientas para que sus peques superen las adversidades”.
Data Lab es el nombre de la herramienta que une todos estos proyectos y la metodología enfocada en el jugador durante la fase de rendimiento. A partir del Juvenil A, ya se ponen a tope con “la idea que tiene Manolo (González) y su equipo técnico, para que el jugador esté preparado para debutar con todas las garantías”, contaba con emoción.
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Fort regresará solo después del receso.Como explicó Xavi Díaz, uno de los capos del Data Lab junto a Unai Ezkurra, esta herramienta agrupa un montón de datos diarios para crear una ficha de cada jugador y comparar con los parámetros de aquellos canteranos que ya han subido al primer equipo. Desde los partidos que han visto los captadores, hasta los informes, entrevistas a familiares, registros GPS, test psicológicos, evolución de lesiones y hasta el control académico.
40% de canteranos en el primer equipo
“Todos esos datos van a la ficha del jugador, así tenemos una visión 360º, con el historial médico, la disponibilidad del jugador, tiempo lesionado, minutos jugados y hasta sus notas de estudios”, expuso Díaz. La misión es igualar o incluso mejorar el número de canteranos en el primer equipo, que ya llega al 40 por ciento de la plantilla. Por ahora, 22 jugadores van más allá de la edad que les toca, y nueve están cedidos en otros equipos.
En cuanto a la procedencia, se mantiene el origen catalán: un cien por cien en iniciación, 98 por ciento en maduración, 84 por ciento en rendimiento, y un 52 por ciento en el primer equipo.
