Hace un año, hasta la jornada 12 del campeonato, Vicente Guaita y Javier Manquillo se cruzaron en el campo varias veces bajo las órdenes de Claudio Giráldez. Pero ahora la cosa ha cambiado, ¡menuda faena! Ambos están en busca de equipo tras acabar su contrato en Vigo el 30 de junio. Llegaron juntos al Celta de la mano de Rafa Benítez y en los últimos meses se han dado cuenta de lo complicado que es seguir en la elite cuando ya pasas los 30.
Guaita, con sus 38 años, dejó todo en el campo durante sus dos temporadas como celeste. Participó en 61 partidos de La Liga y, aunque el año pasado estuvo más en la sombra, se decidió que había que cambiar de portero titular, apostando por el rumano Andrei Radu. Hubo interesados como Valencia, Getafe y Mallorca, pero el portero de Torrent no ha firmado con nadie este verano. ¡No se ha rendido! En sus redes sociales se le ve entrenando a tope.
Por otro lado, Manquillo, que tiene 31 años, salió del Celta por la puerta de atrás. Desde que tuvo su pelea con Giráldez tras el partido contra el Athletic en Balaídos el 19 de enero, el polivalente defensa madrileño no ha vuelto a tener ni una convocatoria. Se pasó los últimos cuatro meses sin jugar, cerrando su etapa en Galicia con 22 encuentros. Y mira que volvió a la Liga con buen físico después de diez años en el extranjero, pero el mercado no le ha dado opciones.
Así que el meta y el defensa están en el paro, igual que lo vivió este verano un mito del Celta que jugó en el extranjero. Hugo Mallo, el tercer jugador con más partidos en la historia del club, terminó su aventura en mayo con el Aris griego. Con 34 añitos, el lateral de Marín busca nuevas ligas fuera de España, porque no quiere volver a competir aquí.
