Desde que el Valencia se comiera un marrón en Girona el pasado sábado, 4 de octubre, hasta que vuelva a saltar al campo el lunes 20, van a pasar 16 días. Durante este tiempo, Carlos Corberán está a tope preparando la excursión a Mendizorroza, buscando traer algo positivo de Vitoria y romper esta racha chunga de solo un punto de los últimos nueve en juego.
Este finde ha sido un parón por selecciones y el siguiente será el 15 de noviembre. Hasta entonces, el Valencia tiene que lidiar con cuatro partidos de LaLiga y uno de Copa del Rey, donde se juega, aunque aún es pronto para decirlo, parte de las esperanzas de esta temporada.
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El Betis ha gestionado mejor la falta de Isco.El calendario que le espera al equipo antes del próximo parón por compromisos internacionales se presenta complicado. La primera estación será en Mendizorroza, el lunes 20 de octubre, donde se las verán con el Alavés. Los babazorros llevan once puntos en lo que llevamos de temporada y solo han caído en uno de los cuatro partidos que han jugado en casa.
Cinco días más tarde, el sábado 25, Mestalla se prepara para el derbi regional entre Valencia y Villarreal. Marcelino regresa a la que fue su casa, pero con un equipo que está en las alturas de la clasificación. Será uno de esos puertos de montaña que el conjunto valencianista tendrá que escalar en un abrir y cerrar de ojos.
Y el segundo, ¡madre mía!, ¡es de categoría especial! El 1 de noviembre, el Valencia hará una visita al siempre complicado Real Madrid. La buena noticia para los ché es que ya saben lo que es robarle puntos al equipo blanco en su casa. Lo hicieron la temporada pasada y eso les ayudó a confirmar su salvación.