El FC Barcelona se lanza a una tempestad llena de retos y la necesidad de mantener todo en calma. Pero ojo, que ya hay rumores de que hay piques en el vestuario entre dos cracks del centro del campo. Hansi Flick no ha dudado en meter mano, porque sabe que cualquier follón puede romper la buena onda del equipo.
La movida se ha cocido a fuego lento, lejos de las cámaras. No han soltado prenda sobre qué ha desencadenado el drama, pero lo que sí se siente es la tensión en el ambiente. La relación personal entre los dos futbolistas no está en su mejor momento, y eso no ayuda nada a la química del grupo.
Discrepancias fuera del césped
En el club hay cierta inquietud porque estamos hablando de dos de los jóvenes más prometedores que han salido de La Masia. En el campo, estos dos se dejan la piel, pero fuera de él, la cosa cambia. Según cuentan, las diferencias entre ellos se han intensificado durante el verano, ¡y ni uno se ha atrevido a hablar del tema públicamente!
Hansi Flick ha estado moviendo los hilos con mucha cautela, evitando que el tema explote en la prensa. Sabe que cualquier palabra podría incrementar la tensión y joder la convivencia en el vestuario. Por esto, ha decidido hacer las cosas en casa, mandando mensajes claros sobre quién tiene su confianza total.
Ambos jugadores son del mismo perfil y están luchando por ocupar la misma posición en el medio campo. Ofrecen llegada, intensidad, y un caracter competitivo que Flick adora, pero esto también convierte la competencia en una pelea constante. La elección del técnico se ve como una jugada estratégica y personal.
Un futuro lejos del Camp Nou
Sin embargo, esta decisión implica que uno de ellos tendrá que hacer las maletas pronto. El Barça no quiere que su valor de mercado se desplome y considera que una salida bien gestionada es lo mejor que puede hacer. Ya hay rumores de que equipos en Europa han preguntado por el jugador que será descartado por Flick.
Desde Inglaterra y Alemania llegan señales de interés por ficharlo en las próximas ventanas de traspasos. Muchos clubs que buscan reforzar su centro del campo ven en esta situación del Barça una oportunidad de oro. El futbolista tiene un caché en ascenso, y el Barça podría sacar una buena pasta por él.
Flick ha dejado claro que su decisión no va solo de fútbol, sino también de confiar en el equipo. Para el míster alemán, es clave que los jugadores estén a tope con la dinámica del grupo. En este caso, ha dejado caer que solo puede quedar uno como el pilar del proyecto.
El elegido de Flick
Después de semanas de especulaciones, al final se ha decidido: uno de los canteranos se queda. El técnico ha apostado por ese jugador que considera su favorito dentro del vestuario y en el campo. La confianza en él se nota en los minutos que le está dando desde la pretemporada.
Mientras tanto, el otro centrocampista está en el punto de mira como el que pagará el pato en esta batalla interna por el favor del entrenador. No significa que no tenga talento ni futuro, pero ahora mismo el Barça ha decidido ir por otra dirección. El club ya escucha ofertas, seguro de que podrá sacar un buen traspaso pronto.
El secreto ya ha salido a la luz: Flick se queda con Gavi, que lo ve como pieza clave para su esquema. El sevillano, ahora mismo en el radar de gigantes como Chelsea y Manchester United, seguirá brillando en el Barça mientras su compañero se prepara para cambiar de aires.