13/08/2025 21:00:00h
La pretemporada del Athletic Club ha sido un drama total, y en San Mamés se ha encendido la bombilla roja. El equipo de Valverde ha encadenado unas cuantas derrotas y está dejando una sensación de “aquí pasa algo raro” justo antes de la Champions League. Las lesiones, sanciones y fichajes que no terminan de cuajar están complicando la movida del míster.
Pero si hay una cosa que tiene a todos con el corazón en un puño, es el nombre de Nico Williams. El chaval, que venía a este verano como el nuevo crack, ha decepcionado en los amistosos. Su rendimiento está muy lejos de lo que la peña esperaba, sobre todo después de lo que se vio en la pasada Eurocopa.
En el Barça, donde estuvo a un paso de aterrizar, están mirando de reojo todo lo que hace el delantero bilbaíno. Laporta y Deco estaban listos para hacer la jugada maestra con él, pensando que encajaría perfecto en el equipo de Hansi Flick. Pero cuando renovó con el Athletic, rodeado de aficionados y con una sonrisa, se acabaron las posibilidades de verlo de azulgrana esta temporada.
Nico Williams jugando con el Athletic Club | Athletic Club
El bajón que confirma los temores
Muchos culés ya tenían sus dudas sobre la decisión de Williams de quedarse en Bilbao. Su pasado cargado de lesiones musculares y su rendimiento irregular en las últimas temporadas hacían pensar que pillarle podía ser un riesgo. Y luego, lo que hemos visto últimamente parece darles la razón.
En varios amistosos, el chaval ha andado con una clara falta de chispa y la confianza por los suelos. Los defensas rivales lo han controlado sin problemas, y sus aportes han sido bastante decepcionantes. Esto ha creado un clima de críticas en la afición rojiblanca, que esperaba un nivel top de su jugador mejor pagado.
En el Barça, estos rollos son vistos como una confirmación de que la operación, aunque prometía, estaba llena de riesgos. Flick, que buscaba mejorar las bandas, ha encontrado ya otros fichajes que le dan más confianza en este momento.
Nico Williams con el Athletic | @athleticclub
Un vestuario en tensión
Pero lo de Nico no solo es tema de fútbol. Fuentes cercanas dicen que su actitud ha armado unos malos rollos internos en el vestuario. Su lenguaje corporal en los entrenos y partidos ha sido motivo de críticas por parte de varios compis.
Esto complica la labor de Valverde, que necesita a su figura ofensiva completamente metida antes de que arranque la temporada seria. La presión por jugar en Champions después de más de una década sin hacerlo, añade más carga al asunto.
En Can Barça, están siguiendo la movida con un poco de alivio. Aunque en verano se pensó en lanzar la casa por la ventana para ficharlo, lo que ha pasado últimamente refuerza la idea de que no hubiera sido la mejor decisión. Ahora, el club puede mirar a otras opciones que generen menos incertidumbre.
Nico Williams con el Athletic | @nicolas_williams9
El Barça ya mira hacia otro lado
Laporta y Deco no han cerrado la puerta a volver a mirar por Nico Williams en el futuro. Pero saben que para que eso suceda, tendría que haber un cambio radical en su forma de jugar y en su mentalidad.
Por ahora, la jugada es consolidar los fichajes que ya han hecho y buscar refuerzos donde más se necesita. Lo de Williams es un recordatorio de que, en esto del fútbol, lo reciente pesa más que cualquier proyección de talento.
En resumen, lo que debería haber sido el verano de la consagración para Nico ha terminado siendo un mar de dudas. Y desde Barcelona, esta situación solo refuerza que el Barça hizo bien en no insistir más.
