Lo más reciente entre Gavi y De Jong podría llevar al neerlandés a abandonar el Barça: Conflicto.

¡Gavi vuelve y el Barça se enciende!

¡Qué locura! Gavi ha demostrado que lo que le hicieron en La Masia le ha sentado de lujo, porque sigue siendo ese crack que ha brillado en el equipo las últimas temporadas.

Desde que pisó el campo, ha dejado claro que no se ha enfriado. Tiene la intensidad a tope, presiona como un loco y se deja la piel en cada jugada. Todo esto no solo le da alegrías al cuerpo técnico y a los fans, sino que hace que el equipo cuente con un jugador clave desde el principio. Su vuelta le da un montón de opciones a Hansi Flick para formar un mediocampo que se adapte a todo lo que salga en el partido.

Un regreso que cambia el juego interno

Lo que pasa con Gavi no es buena noticia solo para el Barcelona; también remueve las aguas internas de la plantilla. Frenkie de Jong estaba casi asegurado como titular junto a Pedri en el centro del campo, pero el canterano se ha puesto las pilas en la pretemporada y ahora ¡hay que ver qué pasa!

Flick sabe que los dos son geniales, pero está claro que, en ciertos partidos, Gavi puede poner ese toque agresivo y físico que se necesita. Con esta competencia, quizás veamos a De Jong rotando o ocupando otros papeles, mientras el joven andaluz se pelea sin piedad por un sitio en el equipo inicial.

Dos estilos, dos maneras de jugar

La pelea entre Gavi y De Jong no es solo cuestión de rendimiento, también es táctica. El neerlandés es un maestro controlando el balón, arrastrando la jugada y rompiendo líneas, además de tener una visión espectacular para lanzar ataques. Por su parte, Gavi es puro fuego, presiona tras pérdida, pone intensidad en cada acción y acelera el ritmo del juego.

Para Flick, tener estas dos opciones es un lujo que le deja jugar con diferentes estrategias según el rival y cómo esté el partido. La decisión de quién jugará no será siempre la misma; esto cambiará dependiendo del momento del juego. Lo que queda claro es que el regreso de Gavi ha subido la tensión en el mediocampo culé, y esta lucha interna podría ser el motor que lleve al equipo a otro nivel.