05/07/2025 13:00:00h
El Barça está a tope con la posible llegada de un crack que puede romper la pana en Europa. Hansi Flick tiene claro que esto no va a ser un paseo. El míster alemán llegó con ganas de revolucionar la movida, pero sabe que este fichaje va a dar mucho que hablar dentro y fuera del vestuario.
Hablamos de una operación que puede hacer temblar cuentas, la directiva culé, con Deco a la cabeza, ya ha dejado caer que va a mover cielo y tierra para hacer que esto suceda. Pero ojo, que hacer esos sacrificios puede crear rima entre los veteranos del equipo. Más aún en un momento en el que se están haciendo ajustes de salarios y el Fair Play Financiero está acechando.
Nico puede ser culé | carpetasfcb.com
Pero eso no es todo, el staff del Barça también tiene en mente el rollo de la convivencia en el campo. El chaval se deja ver con talento, pero hay que saber encajarlo en un equipo donde ya hay unos cracks consolidados y un montón de promesas que quieren brillar. No va a ser fácil repartir minutos y mantener la paz.
Temor en el Barça
Y eso no es lo único que les tiene en ascuas, también está su buena onda con Lamine Yamal. En principio, que dos chavales se lleven bien siempre es guay. Pero en el Barça tienen miedo de que esta amistad, más allá de lo futbolístico, pueda generar una especie de “clan” interno, y Flick quiere evitar eso a toda costa.
El míster germano quiere que cada jugador se integre en el grupo, no que se monten sus propias redes. Ya lo ha dejado claro en las primeras charlas: el vestuario tiene que ser un equipo al final. Si prospera el fichaje, el entrenador se va a encargar de que se adapte desde el minuto uno.
Hansi Flick lo sabe
En Can Barça están decididos a no cometer los errores del pasado, de esas estrellas que llegaban con el foco y al final se quedaban desconectadas. Hansi Flick quiere que todos vayan a una. Y sabe que, con este nombre dando vueltas, va a tener que hacer malabares para lograrlo.
La cosa sigue avanzando, el jugador está listo para dar el salto y enfundarse la camiseta azulgrana, ya ha dejado caer su interés, y el Barça está dispuesto a asumir el desafío. Pero este no es un fichaje cualquiera. Tiene un montón de implicaciones económicas, tácticas y emocionales.
El club espera que el ambiente no afecte su juego, y sobre todo que no se rompa la armonía del grupo. Flick quiere que el Barça sea competitivo, pero también cohesionador. Y esta incorporación puede ser la clave… o un auténtico lío.
