El Valverde está claro que el sorteo de la Champions ha sido un auténtico tuteo. Rivales de nivel que no aplastan las ilusiones de los de Bilbao. Van a enfrentarse en esta locura, por ese orden, a Arsenal, Borussia Dortmund, Qarabag, Newcastle, Slavia Praga, PSG, Atalanta y Sporting de Portugal. “Miras a los contrincantes y piensas que es un sorteo durísimo para nosotros, pero luego ves a los demás y al final todos estamos en el mismo lío. No hay escapatoria. Lo queríamos y ahora toca pelear para ver hasta dónde llegamos”, soltó.
Sobre cómo van a jugar, que se ha desvelado este sábado, comentó que no tiene “una opinión clara”, aunque “empezar con el Arsenal y luego visitar al Dortmund en su casa es un buen primer aviso de lo que viene”. Y claro, se rió del hecho de que “el Arsenal estará un poco confiado” después de que les metieran un 3-0 en el último enfrentamiento en el Emirates.
Se muestra un poco en plan secreto sobre el fichaje de Laporte: “Las cosas son un misterio hasta que no se cierran”. Ahora mismo, lo que más le da vueltas a la cabeza es el partido de mañana en La Cartuja, que es el nuevo campo del Betis mientras reforman el Villamarín. Destacó que los verdiblancos son un rival que “te miran a la cara todo el rato”. “El Betis siempre es un hueso duro, no solo para nosotros sino para cualquier equipo. Ha sido un tira y afloja en las últimas temporadas y es una buena ocasión para nosotros”, expresó el técnico rojiblanco antes de saltar al terreno de juego.
Valverde piensa que jugar en La Cartuja será algo “parecido” a hacerlo en el Benito Villamarín, un estadio donde el Athletic alzó la Copa del Rey en 2024, y eso le trae “buenos recuerdos” porque “al final, ellos juegan con su gente y sienten la presión”.
“No es lo mismo, pero sí parecido”, insistió el de Viandar de la Vera antes de resaltar la ilusión de seguir sumando y mantener esa racha positiva que llevan, aunque ha sido corta y no significa nada, que ya han conseguido con las victorias en San Mamés ante Sevilla y Rayo Vallecano.
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